Estrenos y despedidas

Por Kaik Espada Martín:

Sí, este lunes fue un día raro en la televisión. Varios son los motivos: Comienza nueva serie en Antena 3: La Cúpula. Estreno de serie de ficción estadounidense, que ha sido un exitazo allí, y de momento aquí también. Con un 25 % de share en el primer capítulo y un, hoy en día, casi imposible 28 % de cuota de pantalla en el segundo, esta producción basada en la novela de Stephen King, con el mismo nombre y publicada recientemente en 2009, se ha colocado como el mejor debut de serie de ficción comprada por A3 a EEUU desde los comienzos de la privada.

Vi la serie. Pese a no haber sido muy bien promocionada - la promoción, algo que bajo mi punto de vista, es uno de los talones de Aquiles de esta empresa-, ha sacado unos resultados más inexplicables que los sucesos que conforman el argumento de esta enigmática serie. También es cierto que preveo rápidas emigraciones de espectadores tal y como vayan pasando las semanas.

Frágiles, en Telecinco. Unos empiezan y otros acaban. Es el caso de esta serie, que el lunes finalizó su breve andadura televisiva, pero en esta ocasión no se ha cumplido aquello de “los últimos siempre serán los primeros”. Es un caso atípico de serie de televisión española. Audiencia regular en la primera temporada, se hace la segunda de milagro, pero se elige el peor momento del año para emitirla; el verano, época de poco consumo televisivo. Sin embargo, en sólo una primera temporada la serie ha recibido importantes reconocimientos internacionales, como ya dijimos aquí. Me recuerda un poco a El síndrome de Ulises: serie que se hace famosa, pero no tiene audiencia. Raro.

Isabel, reina de TVE por excelencia. Sólo con ver los datos de audiencia, podemos pronosticar el gran éxito de su segunda temporada. Por detrás únicamente de La cúpula. Aunque ha hecho únicamente un 10 por ciento de share, se puede considerar como un buen registro ya que es la repetición de la primera temporada emitida hace “cuatro días”. Habrá que esperar, pero si sumamos este resultado de la Tres a los generosos resultados en el mismo día de sus programas Espejo Público y El hormiguero, igual podemos estar ante un incipiente cambio de tendencia en la audiencia. En televisión nada es casualidad.